En la casona de hacienda viven solo mujeres: Matilde, la matriarca, sus tres hijas solteras y la más joven, una adoptada. Matilde está muriendo, motivo por el que llegan a la casa sus dos nietos, uno de ellos con su esposa norteamericana. En su confesión póstuma al cura del pueblo, Matilde afirma haber asesinado a su marido, 40 años antes, y haberlo "sepultado" en un arcón de la cochera, arcón que ya estaba ocupado por el cadáver de un hombre, desconocido para ella. Son solo un par de secretos que cohabitarán en la casa y que saldrán a la luz en este breve pero intenso reencuentro familiar.