Director de cine británico, de origen escocés, nacido en Broxburn. Estudió en el Britain’s National Film School. Sus comienzos están unidos al cortometraje, con títulos tanto para el cine como para la televisión. En 1989 dirigió su primer largometraje para el cine, Escándalo (1989) era un proyecto de esencia absolutamente inglesa, que narraba los juegos sexuales que acabaron con el Gabinete del Ministro John Profumo. El Londres de comienzo de los sesenta y su vida nocturna en el East End fueron magistralmente retratados por Caton-Jones con la ayuda de un reparto impecable, Ian McKellen, Jeroen Krabbe, Joanna Whaley-Kilmer y Bridget Fonda, nominada a los Globos de Oro como mejor actriz secundaria. Con su siguiente título, Memphis Belle (1990), cambió totalmente de registro. Inspirada en un documental de la Segunda Guerra Mundial dirigido por William Wyler y en películas como La batalla de Inglaterra o One of Our Aircraft is Missing, Memphis Belle narra la última misión sobre Alemania de un grupo de jóvenes pilotos. La experiencia está llena de tópicos, pero satisfizo la necesidad de Caton-Jones de rodar una película bélica. Con Doc Hollywood (1991) el director tentó la comedia y la adaptación literaria. Basada en la novela de Neil B. Shulman, la historia se decantó por la vertiente romántica y proporcionó al director un respiro antes de embarcarse en una de sus películas más duras y dramáticas, Vida de este chico (1992), en donde Robert de Niro, Ellen Barkin y Leonardo DiCaprio dan fe de una excelente dirección de actores y de la versatilidad de Caton-Jones para abordar diferentes estados de ánimo. De nuevo el director se apoyaba en un texto para desarrollar su historia, esta vez en las memorias de Tobias Wolff. Tras haber repasado con éxito diferentes géneros, Caton-Jones se decide por una película más taquillera. Rob Roy (1995), la épica novela de Sir Walter Scott, proporcionó al director espectáculo, drama y unos personajes extraordinarios llevados a la pantalla por Liam Neeson, Jessica Lange y Tim Roth, que construye uno de los grandes villanos de las últimas décadas por el que fue nominado al Oscar como Mejor actor secundario, premio que finalmente le fue concedido por la Academia Británica. En la línea de los títulos taquilleros Caton-Jones dirigió en 1997 a Bruce Willis y Richard Gere en Chacal, una versión de la que Fred Zinemman dirigiera en 1973, a su vez basada en la novela de Frederick Forsyth. El resultado no fue sin embargo el esperado porque el thriller no estuvo a la altura, de modo que el director decidió probar suerte por primera vez en el medio televisivo.